El ministro de seguridad de la Provincia volvió a manifestar su postura con respecto a la implementación de dichas armas y las definió como “imprescindibles”.
Posterior al asesinato de la mujer policía en el barrio de Recoleta, el ministro de Seguridad de la Provincia de Buenos Aires, Sergio Berni, coincidió con el pedido de un sector de la oposición con respecto al equipamiento de la seguridad con pistolas Taser.
El fallecimiento de la mujer policía conmocionó a gran parte de los bonaerenses y en ese contexto, un sector de Juntos por el Cambio, expresó la “necesidad” de implementar las pistolas Taser como herramienta y equipo de la seguridad bonaerense ante estos casos.
En ese sentido, Sergio Berni también apoyó la idea y afirmó: “Me parece una discusión totalmente estéril, ex temporaria, espasmódica, totalmente especulativa. El uso de las Taser ya no se discute más en el mundo. En la Argentina lo discutimos cuando tenemos este tipo de inconvenientes y son discusiones que no llevan a ningún lado”.
Sin embargo, el ministro remarcó el hecho ocurrido con la policía y desvinculó la situación a la falta de uso de pistolas Taser. En ese sentido, Berni recalcó: “Bajo ningún punto de vista fue una negligencia o una falta de uso o no de Taser”.
“Lo que pasó ayer, con toda la información que tengo, creo que fue lo que se denomina un accidente fatal. Nadie en su buen juicio puede prever que una persona descompensada, que está recibiendo ayuda puede entrar en un estado de excitación como en el que entró y terminar en la tragedia que terminó”, explicó Berni.
En el marco de las declaraciones sobre las Tasers, el juez federal Walter Correa intimó al Gobierno nacional a resolver en 30 días un pedido de la administración porteña para importar 60 Taser, que está demorado más allá del “plazo razonable”.