El vocero presidencial, Manuel Adorni, informó este lunes que la tarjeta con la que actualmente se abona el transporte público ya no será el único medio de pago para colectivos, trenes y subtes.
Este lunes el vocero presidencial, Manuel Adorni, confirmó que se abrirá la competencia para la tarjeta SUBE, el sistema único con el actualmente se abona el transporte público. Así, este podrá cubrirse con otros medios de pago como el celular o tarjetas de débito, crédito o prepagas.
«El Gobierno tomó la decisión, efectivamente, de liberar el sistema de pago en el transporte público», informó el vocero, quién hizo referencia a distintos países alrededor del mundo donde se permiten abonar los colectivos, trenes, subtes y cualquier otro medio de transporte con «el medio que se crea más conveniente».
Además, aclaró que «la SUBE no va a dejar de existir, va a ser en tal caso una opción más, pero no la única». De esta forma, se espera que en unos meses se habilite el pago del transporte público tanto con celular como con tarjeta de crédito, débito o prepagas, al igual que con la SUBE.
«Para nosotros la SUBE sigue cumpliendo un rol clave para fiscalizar los servicios que prestan las empresas de colectivo y los gastos que realizan», aclaró Adorni al señalar que igualmente la SUBE se seguirá utilizando.
El objetivo de esta medida es «simplificar un servicio que se creó hace 15 años y todavía seguía dependiendo de la carga en un kiosco o una estación de pago», además de lograr «la federalización total del sistema».
Antes de la confirmación de Adorni, la noticia ya había trascendido durante el fin de semana y, ahora, se espera que el Gobierno saque un decreto para liberar la forma de pago del transporte público y comenzar a trabajar sobre los detalles que implica el cambio: desde proveedores hasta cuestiones financieras y operativas.
Distintas ciudades del mundo aplican hoy este sistema en el que se puede abonar el transporte público con tarjetas contactless o directamente desde el celular con tecnología NFC (comunicación de campo cercano).
Esta modificación definida por el Gobierno apunta a lograr mayor competencia y simplificar el pago del transporte público en un contexto en el que conseguir el plástico de la SUBE es complicado y no todos los viajeros tienen garantizada la accesibilidad para cargar la tarjeta cada vez que lo precisan.
La medida se tomó luego de que el Gobierno obligara a los pasajeros del AMBA a registrar su tarjeta SUBE para mantener la tarifa sin aumento, mientras que quienes no registraron su plástico deben pagar desde el 1° de abril casi un 40% más del valor del boleto.
Quienes no lo hayan realizado deben pagar el colectivo entre $ 429 y $ 588, según la sección, y entre $ 260 a $ 416 pesos el tren. En tanto, quienes si hayan registrado su tarjeta SUBE continuarán pagando un mínimo de $ 270 en colectivos y $ 130 en trenes.