El intendente de Merlo, dio detalles sobre cómo su comuna atraviesa la crisis económica que repercute a todo el país: “Aumentó la demanda espontánea de comida. Hoy le estamos dando de comer a alrededor de 60 mil personas. Esto para un municipio es muchísimo”, sostuvo.
En este sentido, destacó que en su distrito dejó de hacer pavimento “para poder dar de comer. Hoy hacer un pavimento a los costos dolarizados es casi una quimera con los presupuestos que tenemos en los municipios, habida cuenta por ejemplo que nos quitaron el Fondo Sojero”.
“Se están viendo situaciones que hace mucho tiempo no se veían. En Merlo en 2018 cerraron más de 900 comercios, cerraron 11 industrias y la gente está cada vez peor. El Estado está cada vez más ausente y eso repercute en muchas otras situaciones sociales”, subrayó.