La vicepresidenta de la Nación fue sometida a una operación que se encontraba programada, y confirmaron que no se trata de una urgencia.
Cristina Fernández de Kirchner, actual vicepresidenta argentina, se sometió a una operación en las últimas horas en el Sanatorio Otamendi. La misma se trató de una histerectomía y se encontraba programada, por lo que no se trata de una emergencia médica.
Cristina se internó este jueves a las 6 de la mañana para ser operada una vez que se complete el preoperatorio. Una vez finalizada la operación, la vicepresidenta permanecería internada entre tres y cinco días.
En los últimos días, la actividad de la expresidenta de la Nación fue escasa: publicó un posteo el 27 de octubre recordando el aniversario de la muerte de Néstor Kirchner, expresidente. Además, el fin de semana se encargó de las tareas presidenciales en territorio argentino porque Alberto Fernández estuvo en Roma para participar del G20 y en Escocia para la COP26.
Finalmente, desde el Sanatorio presentaron el parte médico después de la operación que confirma: «La paciente cursa un post operatorio normal, en buen estado general de salud». Además, explicaron, en relación a la histerectomía: «Dicho procedimiento ha sido realizado por la vía laparoscópica».
De qué se trata la operación
La intervención está programada para las 8 y luego de la cirugía se espera que quede internada con una recuperación que puede extenderse de tres a cinco días.
Una vez dada el alta, Cristina Fernández podría comenzar a reincorporarse a sus actividades de manera gradual, hasta retomar plenamente su rutina a las tres semanas de la operación.
Esta operación, denominada histerectomía, es una intervención mediante la cual se extrae el útero y en algunas ocasiones también los ovarios y las trompas de Falopio.
Entre las causas que pueden llevar a realizarla, se encuentran la presencia de fibromas, engrosamientos del endometrio, endometriosis, dolores crónicos en cadera o pelvis, o el hallazgo de tejidos malignos.
Durante el año 2014, su madre, Ofelia Wilhelm, se realizó el mismo procedimiento, también realizado en el Sanatorio Otamendi.
En el tiempo que fue presidenta de la Nación, la actual vicepresidenta tuvo que someterse a intervención quirúrgicas en dos ocasiones: en 2012 se le extirpó la glándula tiroides en el Hospital Universitario Austral, en Pilar, tras un diagnóstico que detectó nódulos y que luego constató que se trataba de «adenomas foliculares».
Asimismo, en el año 2013, se operó por un hematoma subdural que le localizaron entre el cerebro y el cráneo. La intervención, que se llevó adelante en la Fundación Favaloro, duró menos de dos horas y no tuvo complicaciones.