Así lo aseguró el líder radical quien agregó el gobierno vive en una realidad paralela y explicó que “los argentinos son cada vez más pobres”.
“Estoy convencido que siempre hay que dialogar, porque cuando no hay diálogo hay violencia. Ahora, cuando el Gobierno convoca, tenemos que saber con quién vamos a dialogar. El Gobierno no se puede poner de acuerdo entre sus miembros. ¿Vamos a dialogar con los que dicen que no van a aumentar el dólar turista o con los que aumentan un 10% a las compras con tarjeta de crédito en el exterior? ¿Con quienes toman decisiones avalando al Presidente o los que avalan a la vicepresidenta?”, sostuvo Maxi Abad sobre la posibilidad de que Gobierno convoque a un diálogo ante la crítica situación económica e institucional.
“Los Parlamentos son los ámbitos de diálogo normales, donde se acuerda y se desacuerda. El problema es con quién dialogás y cuál es la posición de esa mesa de diálogo. Cuando uno dialoga no deja de lado las convicciones. Rehusarse al diálogo en un momento donde se profundiza la pobreza, la indigencia, la incertidumbre y la pérdida de la calidad educativa, no poder encontrar puntos en común para sacar a la Argentina de la decadencia y ponerla en el camino del desarrollo, a priori negarse no corresponde”, comentó el presidente del Comité Provincia en el programa de Pablo de León, en Radio con Vos.
Para Abad “el Presidente vive una realidad paralela, hace como que no pasada nada. Mientras tanto somos cada vez más pobres. Además, confronta con el motor productivo de la Argentina. Le está pidiendo al campo que liquide 20 mil millones de dólares cuando ya ha liquidado una cifra similar, pero con una brecha cambiaria de más del 150%, y pese a esto el Gobierno igualmente confronta”
Respecto a la situación dialoguista en la Provincia dijo que existen ámbitos naturales “como el Foro de Intendentes y del Gobierno con la oposición, donde no se renuncia a las convicciones de cada uno. Tenemos diferencias profundas con el Gobierno provincial, pero ese diálogo existe. Pasó en los últimos días con los intendentes radicales y del PRO con el gobernador, donde se hablaron de temas de gestión y las necesidades de los municipios, todo en el marco de la institucionalidad. Y muchas veces no encontramos punto de coincidencia”.
También le consultaron sobre la situación económica, más allá del enfrentamiento que Alberto Fernández con el sector agroproductivo: “La macro y la micro economía están patas para arriba, con un Gobierno que no genera confianza, ni en el orden interno ni el externo. Avanza en la colonización del ajuste social. Cuando nosotros hacemos una descripción decimos que es de una decadencia absoluta. Por eso entendemos, y para ello están trabajando las diferentes Fundaciones de los partidos de la coalición, que hay que avanzar con un programa que se conocerá hacia fin de año. Un programa que dé certidumbre hacia dónde marchará la Argentina, que sea económico, productivo para traer divisas al país, energético, educativo para saber cómo terminamos esta decadencia que hipoteca el futuro en nuestros chicos, que genere empleo para achicar la brecha de desocupación, pero también para saber cómo convertimos los planes a partir de la educación en trabajo. En esto se está trabajando”.
En el cierre Abad refirió a las candidaturas en la UCR, solo a nivel nacional. “El radicalismo tendrá una expresión presidencial y hoy tenemos varios candidatos. Quien esté en mejores condiciones para ejercer el liderazgo de la oposición será el candidato de nuestra fuerza política. Me entusiasma Manes en términos personales porque creo que Facundo plantea, concretamente, construir una bisagra frente la Argentina actual”.
