En diálogo con Infowebnoticias RADIO, el dirigente de La Libertad Avanza de Tres de Febrero, se refirió al momento del Gobierno nacional y la importancia de las elecciones del 26 de octubre. “Tenemos que fortalecer todo tipo de vínculo con el electorado y reforzar la idea de que ‘los árboles no crecen de una primavera para otra’”, sentenció.

El miércoles por la tarde, Ricardo Tejerina, dirigente de La Libertad Avanza de Tres de Febrero, dialogó con Adrián Cordara en Infowebnoticias RADIO, por www.radioatomika.com.ar.

Consultado por los avatares de los últimos tiempos del Gobierno nacional y la elección venidera, el dirigente de LLA sostuvo: “Vivimos este momento como la inmensa mayoría de los argentinos. Con expectativa, por un lado, pero con preocupación por el otro. Sabemos que el 26 de octubre es una fecha bisagra. Hablando mal y pronto, si a La Libertad Avanza no la acompaña un buen resultado en las elecciones, el país se puede ir directamente al demonio. Básicamente volver pasar por historias que ya hemos conocido, donde la inestabilidad, las circunstancias adversas, las crisis políticas que devienen en económicas estén a la orden del día. Lo sembrado de diciembre del 2023 hasta la fecha se puede ir por la borda”.

“Tenemos que fortalecer todo tipo de vínculo con el electorado y reforzar la idea de que ‘los árboles no crecen de una primavera para otra’, en definitiva, es un proceso mucho más largo, pero el camino y la orientación que ha tomado el país es la correcta. Aquellos que no lo quieren ver, es porque tienen la nostalgia del pasado y al mismo tiempo tienen todos sus intereses empeñados en ese pasado que ha sido de decadencia y al mismo tiempo una fábrica de pobres que se construyó durante 70 años y es la más grande de Latinoamérica”, sentenció.

En cuanto al salvataje económico de los EE.UU, Tejerina subrayó: “Lo dicen propios y extraños, estamos ante un hecho absolutamente extraordinario en función de la relación bilateral. No es solamente el apoyo diplomático de un Gobierno, sino que tiene que ver con efectividad conducente. Con el hecho de marcar presencia dentro de lo que es la política exterior de Latinoamérica. Y la orientación de la Argentina hacia el concierto de las naciones del mundo que les va bien. Ya probamos con aquellas que les va mal”.