El Presidente recordó a Néstor Kirchner y consideró que «no todo es lo mismo en política» porque «están los que creen que el Estado no tiene que hacer hospitales y esperan que todo lo haga el mercado».
El presidente Alberto Fernández abrió este lunes oficialmente la campaña electoral junto a los candidatos de la lista bonaerense Victoria Tolosa Paz y Daniel Gollan en un acto en Merlo, donde recordó al fallecido Néstor Kirchner y pidió la «ayuda» de todos los argentinos para trabajar por el país.
«Necesito que me ayuden todos y todas. Hagamos la Argentina que nos merecemos, hay una vida que sabemos que existe, hagámosla entre todos y todas», resaltó el jefe de Estado al cerrar su discurso.
Momentos antes, recordó cuando el santacruceño pedía «ayuda» a los ciudadanos para encontrar una salida a los problemas del país, tras asumir como Presidente en 2003.
En Merlo, donde también estuvo junto al gobernador de Buenos Aires, Axel Kicillof, el jefe de Estado volvió a apuntar al modelo planteado por Juntos por el Cambio y aseguró que «no le cuesta lo mismo al hijo de un trabajador convertirse en médico que al hijo de un banquero», por lo que destacó la necesidad de que el Estado brinde oportunidades.
«No le cuesta lo mismo al hijo de un trabajador convertirse en médico que al hijo de un banquero. No es igual. No me vengan a hablar de mérito, hablo de oportunidades. Necesitamos un Estado que iguale las oportunidades», sostuvo Fernández durante la entrega de viviendas y créditos para la construcción en Merlo, provincia de Buenos Aires.
«El Estado hace accesible el acceso de las personas a la casa propia. Esto el mercado no lo hace. Nosotros creemos que el Estado tiene que estar muy presente acompañando a quienes necesitan una casa», indicó el mandatario nacional, y sostuvo: «Los derechos no se dan, simplemente existen y nosotros los reconocemos».
Fernández, además, consideró que «no todo es lo mismo en política» porque «están los que creen que el Estado no tiene que hacer hospitales y esperan que todo lo haga el mercado».
«El mercado terminó pidiéndole a los hospitales públicos que atiendan a sus usuarios», subrayó el Presidente. «Me impresiona cuando miro para atrás lo que nos pasó. Fueron votados dos veces y me pregunto cómo fue que todo eso pasó. En este barrio quedaron 11 mil viviendas sin entregar. Casi hechas, pero sin entregar. La casa ya estaba hecha cuando ellos llegaron, pero deben haber creído que los que habiten las casas iban a saber que las había hecho Cristina y prefirieron que nadie tenga una casa hecha por Cristina», expresó.
«A mí no me importa quién hizo las casas. No es la casa de Cristina ni de Alberto, es la casa de ustedes. Detrás de esta casa está el trabajo de los argentinos», manifestó durante su discurso.
En el inicio de la campaña, recalcó: «Algunos casi celebraban las muertes. Nosotros hicimos lo imposible por impedirlas. Habían dejado todo a medio hacer. Por eso tuvimos que construir hospitales móviles en toda la Argentina. Por eso tuvimos que poner 4000 camas de terapia intensiva».
Respecto al manejo de la pandemia, indicó: «Fuimos de los primeros países que empezaron a vacunar. Somos de los países que con más velocidad está vacunando. Peleamos cada vacuna que llegó a la Argentina. Algunos me dicen que estamos quedando mal con los laboratorios . A mí me daría vergüenza quedar mal con los argentinos».
Y, sobre el Gobierno anterior, reiteró: «En un minuto y medios nos anunciaron que nos endeudaban por 57 mil millones de dólares. Después nos pidieron que nos enamoremos de Christine Lagarde. Eso significó pobreza, hambre y postergación. Esto pasó hace dos años, no hace 50».
«Otros dicen que sobran 20 millones de argentinos en el país. Eligen a los bancos antes que a la gente. Promueven la especulación financiera y nos piden que nos enamoremos del Fondo», agregó.