Se trata de uno de los transportes esenciales que también entra en una nueva etapa debido al incremento de pasajeros que habría por la autorización de nuevas actividades.

Con el fin de preservar a los choferes, y evitar que el transporte público se vuelva uno de los puntos de mayor contagio del virus, la Comisión Nacional de Regulación del Transporte (CNRT) reformuló las reglas para el transporte de pasajeros en tiempos de coronavirus.

En ese sentido, la disposición 28/2020 publicada en el Boletín Oficial, determinó que cada empresa tendrá como principal tarea proveer a cada chofer de un alcohol el gel, mascarillas, alcohol o «cualquier otro insumo que recomiende el Ministerio de Salud en lugares de fácil acceso», con el fin de que puedan permanecer en el vehículo desinfectados.

Además, en las terminales deberá haber un espacio específico en el que puedan realizar el lavado de manos preventivo, como así también los insumos necesarios para ello, como el jabón antibacterial y toallas descartables.

También deberán promover que el contacto entre el personal sea mínimo, “a través de la circulación de elementos, incluidos papeles y dinero, y fomentar el uso digital en cualquier transacción».

Con respecto al transporte urbano, se determinó en este nuevo protocolo que, «se deberá controlar la temperatura de los conductores y si presenta fiebre o algún síntoma de la enfermedad provocada por el virus identificado como Covid-19 (conforme lo determina el Ministerio de Salud), no deberá tomar servicio y deberá seguirse el protocolo para el personal enfermo».

En congruencia con ello, los pasajeros deberán ascender y descender por la puerta trasera, mientras que, mediante una separación, debe quedar aislado el chofer, siendo anulada así la primera fila de asientos.

La desinfección de las unidades funcionales también será obligatoria mediante esta disposición, como así también mantener el distanciamiento social en cada una de las filas en las paradas del micro.